"Dijo no hace mucho mi vecino Marías..." Pues así empieza o empezaba... ¡no! empieza, que aún permanece escrito por algunos lugares, un comentario de texto que comentamos una y otra vez en Literatura en el Colegio. Era un texto al azar, de recorte de periódico, y era del creador de Alatriste y la agrupación de personajes históricos en unas gradas madrileñas. Sí Carlota, sí, co-creadora del primer libro de la saga del Capitán más español de los últimos años... ¡más incluso que el Trueno!
Pues era éste nuestro personaje, su personaje, un hombre que al parecer luchó en Flandes, y no sabemos si bien o no, aparece retratado en el cuadro de "las Lanzas", vulgarmente conocido a la "Rendición de Breda" y allí, tras el pompis del caballo, ese que lucha en escorzo con el que lo visualiza, en esa sala del Museo del Prado, tras horas y horas sentado en los bancos de madera enfrente suyo, dice el vecino de Marías que está el viejo tercio de Flandes, Diego Alatriste. Y todo puede ser, porque en esta vida nos regimos por creencias, pero en esas gradas que cité ya antes, estaba un jovencito sevillano, entre Lope y Quevedo, entre doctores y creídos, y éste chaval, que al parecer fué pintor de Corte, y con un primero como da Silva, y un segundo como Velazquez, todos estamos ya ubicados de quién se trata. Pero no quiero desviarme de éste nuestro "Aragorn cazurro", de la película creada a partir del libro... una película que si bien aguanta bien en las retinas de la gente, da disparidad de opiniones, por lenta, por rápida, por unir cinco libros, oiga, cinco en una misma cinta, y no dejar algo suelto para una secuela habitual en éstos temas... Y no sé si fué acierto, o fué derrota del director, en confiar a éste soldado la imagen de Viggo Mortensen, rey de la Tierra Media, y predilecto de Tolkien, pero el extranjero interpreta un papel que ya antes de hacerlo iba a responder a grandes críticas, pero que tras el rodaje lo deja como "un venido de fuera" que lleva a León más en el corazón que muchos que luchan por la rebelión del Reino Lliunés, ese de León, Zamora, Salamanca...
Por eso, y pese a que empecé hablando de un texto de Reverte, que hablaba de su vecino Luís Marías, y escuchando todo lo acontecido en los últimos días con el mundo literario, hoy quise dedicar mi texto a la literatura, citando León, felicitando a Gamoneda, uno de casa. Enhorabuena.
1 comentario:
¡Grande Reverte!
Publicar un comentario