Relato participante en el concurso de microrrelatos de la Fundación Sierra Pambley. Si te gusta, vota por "LA SELVA DE LOS PEQUEÑOS" aqui. ¡Gracias!
"Ahora un león acechaba a aquella gacela despistada. Un buitre daba vueltas en el cielo y cerca reían un par de hienas. El colibrí observaba de reojo mientras chupaba el néctar acelerado. La mariposa se dio cuenta de aquello y voló hasta la mantis, que golosa saltó al vacío. Cayó encima de una ardilla, que asustada subió hasta su madriguera. La colonia entera se agitó meneando la rama y la colmena de la orilla. Varias abejas salieron, no conté, pero zumbaron hacia la pradera más allá del bosque. Por allí merodeaba la gacela, que saltó y corrió para no ser acribillada. El león, bajo el sol de agosto, suspiró y se dio media vuelta buscando una sombra, y esperando la caza de las leonas, se preguntaba si él era más rey que la que había espantado a su comida…"
"Ahora un león acechaba a aquella gacela despistada. Un buitre daba vueltas en el cielo y cerca reían un par de hienas. El colibrí observaba de reojo mientras chupaba el néctar acelerado. La mariposa se dio cuenta de aquello y voló hasta la mantis, que golosa saltó al vacío. Cayó encima de una ardilla, que asustada subió hasta su madriguera. La colonia entera se agitó meneando la rama y la colmena de la orilla. Varias abejas salieron, no conté, pero zumbaron hacia la pradera más allá del bosque. Por allí merodeaba la gacela, que saltó y corrió para no ser acribillada. El león, bajo el sol de agosto, suspiró y se dio media vuelta buscando una sombra, y esperando la caza de las leonas, se preguntaba si él era más rey que la que había espantado a su comida…"
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